Mis esperanzas
cayeron en la ruina,
todo a mi
alrededor se altera, se deshace,
se mortifica.
Mis miedos
tomaron por la avenida,
cargada de autos
estacionados sin
rumbo alguno.
Mis certezas se
inmovilizan de
recuerdos, de
aromas, de presencia
sin presencia
alguna.
Mis dedos fluyen como
gotas
en el oasis de mi
cuerpo,
buscando alivio
ante tanta ausencia.
Mis edades
preguntan por el amor,
por tu amor que
parece fumigarse
con recuerdos
dolorosos e inhóspitos.
Todo en mi parece
diluirse en la niebla,
del espantoso
futuro que me aguarda.
Pero una sóla
cosa es cierta
por vos daría la
vida, toda la vida.